Fui un enamorado de las "glitazonas" desde que leí un caso clínico sobre un paciente afectado del llamado síndrome de "Prader-Willi", cuya resistencia insulínica le obligaba a utilizar 1.000 unidades de insulina al día (no es un error de ceros). Este paciente tras asociarle metformina y troglitazona reducía sus requerimientos a 500 unidades, luego la reducción de la resistencia era efectiva. Y me enamoré.
También he sido un transmisor del llamado síndrome metabólico desde el año 1991, entonces síndrome "X" y recuerdo como le interrogaba al visitador, cuando me enteré que la licencia de comercialización pasaba de la propietaria japonesa a la licenciataria inglesa y de como esta no acababa de comercializarla, cuando comenzaron los efectos secundarios por hepatopatías.
Vinieron después las comercializaciones de las dos glitazonas conocidas, con menos efectos secundarios, entendidos estos como los que presentaba la troglitazona, hoy retirada.
No tengo para olvidar una reunión de "expertos" sobre la resistencia insulínica, en la que un caudillo cardiólogo hizo su brillante explicación, a cuya mesa plantee la siguiente pregunta:"Ante esta modificación del perfil lipídico, elevación de un 10% de la fracción HDL, en mis pacientes de un 34 a un 37 o 38, con la elevación de las LDL, pero que tengo que admitir que son más pequeñas y menos densas, ¿no les parece que esto es un acto de fe?".
El chorreo que me cayó fue de consideración y digo esto porque al finalizar la reunión un compañero de Huelva me comentó que él no hubiera tolerado semejante contestación.
Buscando uno encuentra joyas como esta que el caudillo cardiólogo conoce bien.
Después vinieron las historias de los efectos secundarios de las nuevas "glitazonas".
Es reciente la llamativa historia de la insulina inhalada.
La no menos interesante y atractiva del producto inyectable, una hormona, para la osteoporosis.
Ahora le toca el turno a una molécula que está comercializa como Ezetrol y su asociación con estatinas, de jugoso comentario en "primum non nocere"(http://rafabravo.wordpress.com/2008/01/15/otro-que-muerde-el-polvo/).
Ya no uso glitazonas, nada que comentar sobre la inhalaad, no realizo seguimientos de recetas a la inyectable, no recuerdo ezetrol entre las prescripciones y menos asociado a estatinas, pero para que mis nietos, cuando los tenga, no duerman cada día tengo más historias. y pido disculpas para todo aquello en lo que metí la pata, pero mi respuesta para el cardiólogo es que los que me examinan son solo mis pacientes.
Dedicado a mis "Rafas", Bravo, Rotaeche y a Itziar Perez, ellos ya saben el porqué.
Esta obra está bajo una
licencia de Creative Commons.
3 comentarios:
Yo suelo utizar avandia y avandamet y me va bastante bien.
Pero es a los pacientes a los que debe ir bien. La DM es casi una enfermedad cardiovascular y la glitazonas causan el doble de insuficiencias cardiacas, además de edema de mácula (ceguera a veces reversible,) fracturas en mujeres, edema dilucional y para rematarlo parece que incluso puede aumentar los infartos.
Se ha suspendido el estudio ACCORD. Los pacientes diabéticos que tenían un control más estricto de la glucemia se morían más. Para ese control más estricto se usaban varios fármacos, uno de los cuales era la rosiglitazona, aunque no está demostrado que sea por eso...
Publicar un comentario